Trabajadores de Acapulco y su rechazo a trasladarse de destino, han causado la escasez de mano de obra en Puerto Vallarta tras el huracán ‘Otis’, lo que ha llevado a la CANIRAC a buscar empleados fuera de la región. Aunque se intentó atraer talento de Acapulco, la resistencia de los trabajadores locales ha creado un déficit significativo, con aproximadamente siete mil empleados necesarios.
Durante una entrevista, José Luis Carvajal, presidente de la Cámara de Restaurantes de Puerto Vallarta y Riviera Nayarit, reveló que la idea de trasladarse para trabajar en Vallarta resultó inviable para muchos trabajadores de Acapulco, Guerrero. El temor al abandono de hogares y la dificultad económica de mantener dos residencias fueron factores determinantes en la decisión de quedarse en su lugar de origen.
La situación destaca los desafíos que enfrenta la industria local para cubrir puestos vacantes y la importancia de estrategias efectivas para superar la escasez laboral que ha afectado al municipio, tras la pandemia por el covid-19